Los libros han sido mi vida durante los últimos 26 años. Desde algún momento del verano de 1994 hasta hoy no he pasado un solo día sin un libro en la mano, por eso me costó tanto trabajo elegir uno para recomendar este #ViernesDeLectura, que además coincide con el Día mundial del libro y del Derecho de Autor, conmemoración proclamada por la UNESCO en 1995 justo el 23 de abril porque este día “coincide con la de la desaparición de los escritores William Shakespeare, Miguel de Cervantes e Inca Garcilaso de la Vega.”
Ya que los libros son el tema de moda, hoy recomiendo Para leerte mejor, de Felipe Garrido, una obra escrita con la motivación de ser útil: por un lado busca comprender la formación de lectores, y por otro proponer estrategias para que más niños y adultos se acerquen a los libros.
Inicia con una aclaración de principios, en donde describe los diferentes niveles de lectores, dependiendo de la profundidad de comprensión y utilidad de la lectura, y donde cuenta algunas experiencias que el autor ha tenido en relación con la lectura y la escritura.
El libro está dividido en tres partes: lectores, intermedio (hacer o no hacer) y la lectura, cada una con conceptos muy claros, concretos y comprobados por Garrido, quien ha dedicado a los libros, la lectura y la palabra su vida entera y tiene una manera singular, divertida y algo irreverente de tratar este tema que genera diversas asperezas y en realidad debería ser un motivo de regocijo.
Algunas ideas que encontrarás en este libro son: hacer de los libros algo cotidiano y no especial, solo apropiado para algunos elegidos; leer a los niños lo más pronto posible; no poner a los libros en pleito con otras formas de entretenimiento; hacer saber a los posibles lectores que no pasa nada si abandonan un libro poco interesante o aburrido para ellos; hacer énfasis que leer es algo placentero, no una tarea obligatoria para obtener una calificación, y mucho más.
Los libros son de los objetos más placenteros que existen sobre la faz de la tierra, por eso hoy propongo tratarlos con la ligereza y el regocijo que se merecen.